El Main Event de la WSOP no es un toirneo más, independientemente del título de campeón del mundo que atesora el ganador y los 10 millones (más, menos impuestos y acciones) que se lleva. En el medio se nutre de historias, curiosidades, hechos insólitos… como el que le sucedió al pobre George Dolofan , que supo estar en el cielo y ahora ni si quiera levantó vuelo.

Como se adivina al ver el título de esta nota, el estadounidense quedó como líder en fichas en el Día 1B del Evento Principal del 2024, en el mismo salón del Horseshoe & Paris Las Vegas , montado en un impresionante stack de 314.000 puntos, el mejor de un campo integrado por 830 jugadores. Dolofan pudo contar a sus amigos la hazaña de haber sido puntero en un vuelo incial de semejante torneo, en el cual luego quedó fuera en el Día 2 para finalizar 1.084° por US$17.500. Pese a la lejanía en la lista ITM, se había ganado su foto.

Las cartas no ayudaron a Dolofan.

Pasó un año, y quizá hombre de costumbres o cábalas, Dolofan volvió a poner los 10.000 dólares de la inscripción para jugar el Día 1B. Quizá el destino le tenía reservado el mismo final, o similar. Pero… todo lo contrario.

Ya con más de 800 jugadores anotados, en la priemra media hora no hubo nadie que se marchara al rail. Pero Dolofan ya la veía mal cuando perdió (sin mostrar las cartas) ante un par en manos de James Gorham -us. Inmediatamente, el (anti) héroe se vio all-in, con oar de ochos en mano, que se convitió en trío en el turn. Sin emabargo, esa misma carta le formaba la escalera a su rival, que había entrado con Q-J y recibía, además, el 9 y el 10 necesario para quedarse en la mano.

Tan rápido se fue Dolofan, que ni tiempo a sacarle una foto hubo: las publicadas son del 2024, año que sí recordará…