El embajador de partypoker Sam Trickett
y Antonio Esfandiari
son viejos conocidos. Han jugado miles de manos juntos y hasta han definido uno de los torneos más grandes de la historia: el US$1.000.000 Big One for One Drop de la WSOP 2012. Esta vez no hay millones en juego, pero sí cientos de miles.
Junto a un grupo de recreacionales de bolsillos abundantes como Rob Yong
y Lauren Roberts
fueron invitados a un exclusivo cash game organizado por Poker Night in America. Se sentaron a jugar un poco del tradicional No Limit Hold’em con stacks de, cuánto menos, 100 mil dólares mientras que Doug Polk
, quien se moría por recibir naipes, tomó la conducción del evento y analizó cada una de las jugadas.
¿El resultado? Una gran cantidad de pozos de seis cifras que todos podemos disfrutar.
