Después de catorce años, Tiger Woods  ganó el Masters de Augusta y arruinó a varios corredores de apuestas de acuerdo con los tabloides ingleses que lo colocaron a un precio importante, de 14 a 1. Claro que del otro lado de la balanza hubo gente que festejó este regreso a lo grande del Tigre.

James Adducci , un estadounidense de Wisconsin, de 39 años, se tomó el martes un avión a Las Vegas y apostó 85.000 dólares a que Tiger ganaba el torneo reservado para 87 jugadores, entre ellos Ángel Cabrera y Emiliano Grillo . El resultado es el que todos vimos, con el ex N°1 colocándose la chaqueta verde de los campeones. Adducci se llevó dinero para ponerse unas cuantas sastrerías: 1.190.000 dólares.

Adducci pasó por las oficinas de William Hill a recolectar su cheque y sacarse la foto. «Fue todo lo que tenía y podía permitirme perder. Pensé que él estaba predestinado a ganar», explicó este corredor de bolsa las razones de la que fue su «primera apuesta deportiva», con la que pagará deudas de 25.000 dólares contraídas por una hipoteca, remodelará su casa e invertirá el resto.

Nick Bogdanovich , director de operaciones de la casa de apuestas en Estados Unidos, comentó. «Es fantástico ver a Tiger de vuelta. Es un día doloroso para William Hill, es nuestra mayor pérdida, pero es un gran día para el golf».

Para Woods es el 15° Major en su carrera, por el que cobró dos millones de dólares. Quienes lo escoltaron a un golpe, Brooks Koepka , Xander Schauffele y Dustin Johnson , cobraron, cada uno, US$300.000 menos que Adducci.

Con la quinta chaqueta verde en Augusta para Woods, William Hill no fue la única casa de apuestas con numerosas deudas. SuperBook en Westgate Las Vegas y BetOnline.ag sufrieron pérdidas muy elevadas.