
Scotter Clark , mejor conocido como “El Pirata” en los círculos del poker por su descarado atuendo al estilo Jack Sparrow, ha protagonizado otro giro digno de guion de Hollywood. El último 12 de agosto de 2025, un tribunal en Tulsa, Oklahoma, archivó la acusación en su contra por lesiones graves luego de que el testigo estrella ni siquiera apareciera en corte. La Fiscalía pidió el archivo del caso, y el juez no tuvo objeciones.
Este personaje, ya célebre por sus excesos tanto dentro como fuera de las mesas, llega a este punto tras un junio turbulento: se le vinculó con un ataque que dejó un hombre con puñaladas en la cabeza y el pecho, una mujer embestida por una camioneta… y hasta un cuestionamiento por acoso sexual. El escándalo fue mayúsculo, pero ambos sobrevivieron.
Clark, que el 14 de julio se declaró “no culpable” y salió bajo una fianza de US$10 000, logró finalmente que se le levantara la fianza con la desestimación del caso.
Pero ni su estilo ni sus antecedentes quedan limpios: estamos hablando de alguien que, según The HendonMob, acumula más de US$500.000 en ganancias en eventos en vivo y ha competido con frecuencia en destacados circuitos.
Su leyenda delictiva viene de lejos: fue condenado por narcotráfico en el año 2000 y pasó 15 años tras las rejas. Esa historia criminal marcó su reputación incluso antes de que naciera el apodo “El Pirata”.

Scotter Clark es (era) un habitué de la WSOP.
Por si fuera poco, la World Series of Poker lo expulsó en 2022, otro golpe público que alimenta su estela de “bad boy”.
Pero la narrativa no concluye aquí: en Grant County aún lo espera un nuevo juicio por allanamiento de morada y daños a la propiedad, con fecha fijada para el 30 de septiembre de 2025.
¿Por qué banearon a Jack Sparrow de la WSOP?
En la WSOP 2023, el jugador tras el disfraz de pirata, fue parte del show de la entrega de premios del evento Million Dollar Bounty e incluso cobró en el Main Event, pero posteriormente fue baneado de todas las instalaciones del Caesars Entertainment, la compañía propietaria de la marca WSOP.
Esta información surgió desde el sitio Poker.org, donde pudieron hablar con el afectado y la razón de la prohibición ocurrió debido a las armas de juguete, que son parte de la caracterización y no tienen la capacidad de disparar ningún tipo de proyectil.
Según dicho sitio, el hombre fue contratado por la WSOP para participar de la ceremonia de recompensas, con un contrato que también era válido para la edición del 2023. Sin embargo, durante el Día 2D del Main Event, el jugador fue abordado por la seguridad del torneo para quitarle las armas, pensando que eran de verdad.
Clark demostró que los artículos eran falsos y logró continuar jugando hasta caer en el puesto 195 con un cobro de US$53.900. Tras esto, la seguridad volvió a acercarse y le dieron la noticia que estaba baneado para siempre de la WSOP y de cualquier otra propiedad del grupo Caesars Entertainment.
Clark, con cara de «WTF», no recibió más detalles, pero según él fue porque los conceptos promocionales de la WSOP entraron en conflicto con la prohibición de armas de Caesars y la mayoría de los casinos, incluso en el caso de artículos de juguete, sin funcionalidad.
Después de eso Clark no dio más detalles de su baneo, ni tampoco el serial se ha referido a que su caso podría estudiarse para poder quitarle la prohibición teniendo en cuenta que el jugador fue contratado por la propia WSOP. Pero visto lo anterior, está más cerca de volver a navegar por los mares que regresar a la WSOP.