
El BSOP 2025 ha sido testigo de un fenómeno que trasciende fronteras: Alex Manzano , el chileno que se ha convertido en una de las figuras más sólidas del circuito. Especialista en Omaha, el jugador mantiene un dominio absoluto en la temporada, sumando al menos un podio por etapa y sacando una ventaja de 999 puntos sobre su más cercano perseguidor en el ranking de Jugador del Año de Omaha.
Para Manzano, cada trofeo conserva su valor. “Siempre es un placer levantar trofeos, especialmente en el circuito más prestigioso de Sudamérica”, declaró con orgullo. Y aunque la seguidilla de buenos resultados pueda hacer pensar lo contrario, asegura que cada victoria se siente única. Además, no duda en recomendar el BSOP a sus compatriotas: “Siempre recomiendo a los chilenos venir. Creo que es un destino ideal para los amantes del poker”.
Su constancia también lo ha llevado a figurar en el ranking de Jugador Extranjero del Año, aunque admite que alcanzar a los líderes es casi imposible. Con 3.163 puntos, está muy lejos de los colombianos Sebastian Fonseca (5.486) y Carlos Serrano
, a quienes no duda en elogiar: “Son monstruos del poker, muy difíciles de derrotar”.

Manzano es el único chileno que ha ganado un brazalete en la WSOP y lo hizo en un torneo de Omaha.
El plan del chileno para la penúltima parada de la temporada, el BSOP Foz do Iguaçu, ya está trazado. “Pretendo hacer lo mismo que en todas las demás etapas: priorizar el Omaha y, si pierdo, jugar cualquier otro torneo disponible ese día”, comentó. Para él, la clave ha sido mantener el enfoque: tras tomar la delantera en la segunda etapa, solo ha ampliado la diferencia. “Parece solo cuestión de tiempo hasta que me convierta en campeón”, aseguró con confianza.
Más allá de sus logros personales, Manzano valora el impacto que su éxito ha tenido en Chile. Cada vez más jugadores se interesan en el BSOP, preguntando por detalles de alojamiento, viajes y torneos. “Chile necesita un embajador del BSOP que los ayude a conectarse”, reflexionó. Y no está solo en esta misión: compatriotas como Cristopher Arismendi (subcampeón del High Roller de R$ 25.000) y Mauricio Pinochet
(campeón del Omaha PKO) ya dejaron su huella.
El objetivo final es claro: ver a una delegación chilena numerosa en el BSOP Millions, levantando trofeos y ondeando la bandera roja, blanca y azul en el torneo más grande de Latinoamérica. Para Manzano, este es apenas el inicio de una revolución chilena en el poker regional.