
La última pasada, el mayor circuito de poker de América Latina fue noticia en todo el mundo y el motivo fue el anuncio del BSOP Millions. Entre las primeras atracciones reveladas, una impactó mucho, principalmente a la comunidad brasileña: el anuncio de la Super High Roller Series y el Main Event con una buy-in (entrada) de US$100.000.
Será la primera vez que Brasil será sede de un torneo con una entrada de medio millón de reales. La estructura de la competencia tendrá una duración de tres días, realizándose del 21 al 23 de noviembre. La expectativa es que jugadores de todo el mundo aterricen para ser parte de esta nueva historia del poker brasileño.
“Fue una mezcla de sentimientos”, comentó Rafael Moraes , CEO del BSOP, sobre las primeras conversaciones con jugadores para la idealización del torneo. “Todo el mundo no creía que el BSOP tendría ese coraje y, al mismo tiempo, sintió mucho orgullo de que hiciéramos un torneo con una buy-in de US$100.000, de esta magnitud con la economía que tenemos en América Latina y con el coraje de traer jugadores de todo el mundo para jugar al poker en Brasil”.
Cabe recordar que actualmente el torneo más caro de la historia del póquer brasileño se realizó en la última edición del BSOP Millions. The Legends con una buy-in de US$50.000, contó con 43 participantes y coronó a Leandro Zavodini como el gran campeón. La disputa también entró en los libros de los récords por otro motivo: el mayor premio distribuido en el país a un jugador en un solo torneo, con el ganador embolsando R$3,5 millones.
El cronograma de la Super High Roller Series estará compuesto por siete eventos. La disputa responsable del puntapié inicial será el SHR Invitational, con buy-in de US$10.000 y que se realizará los días 14 y 15 de noviembre. El calendario también tendrá un Super High Roller de US$20.000, un SHR de US$30.000, un Super High Roller de US$50.000 y dos eventos de un día: el One Day de US$20.000 y el One Day de US$10.000.
Devanir Campos -BR-, CFO del BSOP y presente en la organización desde el inicio, comentó sobre la trayectoria del circuito y advirtió: la Super High Roller Series no es el final, sino un paso más en los objetivos del circuito.
“Ver dónde está el mercado brasileño de poker, hace 23 años esto era inimaginable. Quien empezó allá en 2003 y 2004, como yo y algunas pocas personas que aún siguen, fue por pura pasión, principalmente por querer jugar torneos, divertirse y estar inserto en este medio. Hoy, viendo al BSOP alcanzando estos niveles de buy-in con un producto muy bueno, reconocido internacionalmente y ganando premios, es una sensación muy gratificante, una trayectoria muy bien construida. Sabemos que no hemos llegado a donde queremos, estamos trabajando para sorprender y encantar cada vez más, no solo a los jugadores que ya nos conocen, sino también a aquellos que queremos alcanzar y que nos conocerán”.