
En el mundo del poker profesional, donde las diferencias se miden en detalles milimétricos y la presión es constante, la fortaleza mental marca la diferencia. Jason Koon , embajador de PokerStars y uno de los jugadores más exitosos de todos los tiempos, ha hecho de la visualización un pilar fundamental de su carrera. En entrevista con PokerStars Blog, compartió cómo este enfoque lo ha llevado a conquistar sueños que parecían lejanos y a mantener intacta su ambición.
De la visión al logro
Koon, quien recientemente obtuvo el segundo lugar en el €25K PLO High Roller del EPT Barcelona por €268,400, viene de coronar su segundo brazalete en la World Series of Poker: un evento de US$50,000 que le entregó casi dos millones de dólares. Aunque acostumbrado a grandes triunfos, asegura que cada victoria se siente como un sueño.
La clave, según él, ha sido proyectar sus metas desde 2010, cuando elaboró un “vision board” con objetivos personales y profesionales. Allí escribió deseos como “ser mejor amigo”, “comprar una casa para mi madre” y “ganar un brazalete WSOP”. Con los años, todos se han cumplido.

Jason Koon tiene poco más de US$66M ganados en torneos MTT, según HendonMob.
Más que superstición
Para Koon, visualizar no es magia, sino dirección. “No se trata de controlar la varianza. Imaginarnos ganando no hará que los ases siempre superen a los reyes”, explica. “Es creer de verdad que puedes hacerlo”. Esa convicción lo ayudó a superar bloqueos mentales, como el de 2013, cuando dudaba si alguna vez ganaría un gran torneo en vivo.
El trabajo ha sido arduo y apoyado por colegas de élite como Ben Tollerene , Seth Davies
y Stephen Chidwick
. “Buscamos cada pequeña ventaja posible, y estar rodeado de gente tan centrada ha sido clave”, comenta.
El precio del esfuerzo de Jason Koon
Esa concentración total le permite aislarse del mundo en plena competencia, aunque después paga el costo físico y emocional. Koon describe esa intensidad como un “estado de guerra”, del que a veces sale exhausto. Por eso, cada sacrificio lejos de su esposa e hijos debe valer la pena.
Con más de US$66 millones en ganancias y un lugar asegurado entre las leyendas del poker, Koon no concibe otra alternativa: no tiene un plan B. Su mentalidad es simple y contundente: “Voy a ser este jugador. No es que tenga opción”.